Marchando de Blanco

Ayer, un buen amigo quiso compartir sus pensamientos sobre el 20 de Julio y su visión de lo sucedido en Colombia ese día. Manifestó en su correo su interés por conocer los pensamientos de aquellos que recibimos el mensaje, y me pareció una oportunidad ineludible para hacer una aproximación al hecho en un tono diferente con una reflexión quizá no muy original. En todo caso, sigo forjando mis ideas, espero que ustedes me ayuden.

Pues entonces estos son mis pensamientos con respecto al 20 de Julio de 2008...

El problema en marchar de blanco es que nos vemos muchos, como en realidad somos, quienes queremos un camino diferente al que eligieron esos compatriotas. El blanco nos hace ver numerosos, grandes, limpios, llenos de esperanza, con ganas de paz. Y digo que es un problema por que al llevar un mensaje contrario al demostrado por las guerrillas de nuestro país, les permite a estos grupos ilegales certificar que su “proyecto político” va en contra de los intereses del pueblo y que la única salida que les queda es el narcotráfico.

Pensando en esto, y luego de realizar una reflexión seria (y tratando de hacerla diferente) sobre la marcha del 20 de Julio y nuestros 198 años de independencia, decidí buscar la razón por la cual el blanco ha sido el color elegido para las marchas. Y es que por muy lógica que parezca la respuesta, y si bien ese color es el color de la paz, quise buscar alternativas en un color con el que podamos marchar igualmente unidos y lograr, de alguna manera, que finalmente reaccione ese grupo de compatriotas insensibles... Existirá algún color con el que no nos ignoren?

Como siempre fue difícil llegar a una conclusión, y el proceso comenzó optando por supuesto, por los colores de nuestra bandera...

En principio pensé en el amarillo, el color del oro (ese que se nos llevaron y que todavía explotan ilegalmente compañías extranjeras en el Choco) y el preponderante en nuestra bandera...pero desistí de la idea unos minutos después. La razón: Es muy probable que nos confundieran a todos con simpatizantes del Polo Democrático Alternativo, consecuentemente en simpatizantes de izquierda, posteriormente en “románticos comunistas”, y de manera ineludible en seguidores del “proyecto” de las FARC. Esto podría desencadenar en una prosa arrogante, larga e indescifrable de Carlos Gaviria y en un comunicado erróneo de las FARC en el que afirmen que “el pueblo está en su lucha”...en conclusión, idea descartada!

Luego del amarillo considere el azul. Ese color que representa nuestros amplios recursos hídricos, dos océanos y miles de ríos que recorren nuestro país...pero fue necesario desechar la idea. La razón: Ese color nos haría a todos seguidores del partido conservador, desembocaría en una “nota de protesta” (como están de moda!) del partido liberal, provocaría una sonrisa de Fabio Valencia Cossio, e impulsaría una candidatura de Carlos Holguín en 2010...en conclusión, idea descartada!

Como último recurso decidí, con recelo por lo sucedido con los anteriores colores, considerar el rojo. Ese color que representa la sangre que nos dio la libertad, la que derramaron nuestros compatriotas para fundar esta Nación, y la que ha demarrado todo el pueblo Colombiano a través de su historia. Ese color, sin embargo, nos clasificaría a los marchantes como liberales, generaría la respectiva “nota de protesta” del partido conservador, provocaría la candidatura de Cesar Gaviria, aumentaría los gritos en el congreso de Héctor Elí Rojas y quizá incitaría la remoción del turbante de Piedad Córdoba...en conclusión, idea descartada!

Pues bien, solo me quedaba considerar el hecho de marchar desnudos. Y a pesar de ser positivo por el hecho de que la atención de los medios y la población mundial estaría verdaderamente centrada en Colombia para admirar la belleza de nuestras mujeres y el espectáculo cirquense (sin que falte el equipo periodístico cubriendo en exclusiva el recorrido del “Tino”), podríamos terminar mas en un circo de excitaciones y abusos sexuales que en una marcha por la paz y la libertad.

Y entonces, después de reflexionar por largo rato (confieso que mi proceso de análisis no es veloz ni acertado), vi la luz al final del túnel. Se me ocurrió que, con el respeto de la Cruz Roja Internacional, y sin llegar a justificar las acciones de un Gobierno que no mide las consecuencias de sus actos, marcháramos todos con chalecos de la Cruz Roja. La razón: podríamos darle un empujón a Coltejer para su nuevo arranque, no generaría choques entre los dos grandes partidos políticos por que el chaleco trae el rojo y el azul, nos cubriría de las lluvias tan peligrosas que están azotando a nuestro país, y mas importante aun, podríamos lograr que salgan otros dos como “Gafas” y “Cesar” y nos entreguen a los 2.800 secuestrados que hay en nuestro país.

No sé si sea viable esta opción, pero desde ya convoco a la marcha! El que quiera unirse o rechazarla deje su comentario.

Reflexión:

Este 20 de Julio fue diferente. El hecho de que millones de personas hayan conformado una marcha pacifica sin precedentes pidiendo la libertad de los secuestrados renueva el espíritu de un país que parece ya no identificarse con la disputa entre centralistas y federalistas, la guerra entre pájaros y guerrillas liberales, los altercados entre liberales y conservadores, la violencia entre paramilitares y guerrilla.

Este día va a quedar en la memoria de todos con un significado quizá diferente. Para mi, mas allá del numero de personas que hayan salido a las calles, de quien haya entonado el himno, de quien nos haya acompañado, y de quien haya transmitido el acto; este 20 de Julio va a recordarse por que por unos momentos la polarización que ha vivido mi país desde su independencia se vio opacada por la petición de libertad.

Ese 20 de Julio la mayoría de los colombianos dejaron atrás las distinciones, las rivalidades, las diferencias...Ese 20 de Julio fuimos capaces de unirnos en torno a unos mismos colores, a una misma bandera, a un mismo escudo, a un mismo himno...Fuimos capaces de pensar como Nación.

Tal vez sea mejor seguir marchando de blanco...

La Tierra vista de "arriba"

Esta es la visión que un americano tiene de la tierra.

Aunque Thomas Friedman nació en Inglaterra, su carácter patriótico y su amor por ese país son característicos de aquellos personajes que abundan en Estados Unidos. En mi opinión, en ocasiones su sentido nacionalista resplandece con tanta fuerza que las demás áreas quedan a oscuras…Y sin llegar a afirmar que tenga razón o esté equivocado en su descripción, quiero compartir con ustedes su visión de la tierra en forma de ciudad.

A mí me pareció interesante, pero sigo forjando mi opinión! Juzguen ustedes mismos!

"Europa occidental seria un lujoso complejo de pisos tutelados, con una población envejecida, atendida por enfermeras turcas.

Estados Unidos sería una urbanización rodeada por una verja [cerca], con detector de metales en la entrada y mucha gente sentada en sus jardines delanteros quejándose de lo vagos que son todos los demás, si bien hay una pequeña abertura en la verja por la que entran trabajadores mexicanos y otros inmigrantes llenos de energía que contribuyen al funcionamiento de esta comunidad protegida con cancela.

Latinoamérica seria el barrio animado de la ciudad, el distrito de los bares y discotecas, donde la jornada laboral no empieza hasta las diez de la noche y todo el mundo duerme hasta el mediodía. Sin duda, es el sitio al que ir de marcha, pero entre una disco y otra no ves que aparezcan mucho negocios nuevos, excepto en la calle donde viven los chilenos. En este barrio, los propietarios de los inmuebles casi nunca reinvierten sus ingresos allí mismo, sino que los tienen guardados en un
banco en la otra punta de la ciudad.

La calle árabe seria un callejón oscuro en el que no se atreven a entrar los foráneos, salvo en unas cuantas calles laterales llamadas Dubai, Jordania, Bahrein, Qatar, y Marruecos. Los únicos negocios nuevos son gasolineras, cuyos propietarios, igual que las elites del barrio latino, rara vez reinvierten sus fondos en su zona. Mucha gente de la calle árabe tiene las cortinas echadas, las contraventas cerradas y letreros en la parte de adelante con frases como "Prohibido pasar. Perro
peligroso".

La India, China, y el este asiático serian los "barrios humildes". Su entorno se caracteriza por un gran mercado lleno de bullicio y actividad, formado por pequeños comercios y fabricas de una sola nave, entre los que se ven, repartidas aquí y allá, escuelas Stanley Kaplan de preparación a la selectividad y facultades de ingeniería. En este barrio nadie duerme, todos son familias numerosas bajo un mismo techo y todo el mundo trabaja y ahorra para conseguir pasar a "los barrios acomodados". En las calles chinas no impera la ley pero están todas bien asfaltadas, no hay socavones y todas las farolas funcionan. Por el contrario, en las calles indias nadie arregla las farolas, las vías están llenas de surcos y rodadas, pero la policía insiste mucho en que se cumplan las leyes. En las calles indias necesitas permiso para abrir un tenderete de limonadas. Por suerte, se puede sobornar a los polis de la zona y los empresarios exitosos tienen todos ellos sus propios generadores para el funcionamiento de sus fábricas y los móviles de última generación para salvar el escollo que supone tener por los suelos todos los postes telefónicos de la zona.

Desgraciadamente, África es esa parte de la ciudad en la que todos los comercios están cerrados a cal y canto, la esperanza de vida cada vez es menor y los únicos edificios nuevos que ves son clínicas de asistencia médica."

Friedman, T. (2004). Los países en vías de desarrollo y la Tierra plana. Ediciones Martínez Roca, S.A. La Tierra es plana: 331-332. Editorial Planeta Colombiana S.A., Bogotá.

Pd. Que sería de este ejercicio escrito por un periodista de Zimbawe, Irán, o Myanmar? Que tal que lo escribiera Bush, Mugabe, o VOS MISMO?

"Pan y Circo para el pueblo"

Si no estoy mal fue Nerón quien propuso en tiempos del imperio romano, darle al pueblo pan y circo para mantenerlos al margen de la decadencia de uno de los imperios más exitosos que haya visto la tierra. Desde entonces, varios han implementado su tesis, muchos otros la han criticado a cabalidad, y en la mayoría de nosotros ha surgido un sentimiento generalizado de repudio contra esta práctica.

Yo, como de costumbre, no he decidido con que grupo estaré de acuerdo, y creo que es posible que cree un nuevo movimiento civil que pida el pan y el circo, eso sí, dependiendo del pan y del circo.

Si entendemos el circo como entretenimiento, y el pan como el suplemento de necesidades básicas, me atrevería a dividir nuestro planeta en cuatro grupos:

1. Países que tienen pan y circo: Es el caso de los países industrializados y protagonistas del escenario mundial. Entre esos puedo destacar a E.U donde cada espectáculo o evento público es un todo circo (empezando por los de su presidente), y su población está o muy bien alimentada o simplemente muy alimentada…como lo queramos ver.

2. Países que tienen pan pero les falta circo: En tierras como Dinamarca o Suiza se habla de modelos perfectos de distribución de la riqueza, con acceso a servicios de educación, salud y en ocasiones de transporte subsidiados por el gobierno (a razón de altos impuestos justificados por los beneficios que gozan!), pero allí mismo se registran tasas de suicidio que han disparado las alarmas en esas naciones (Claro que Dinamarca encabezó la última encuesta de los países más felices seguido de Puerto Rico y Colombia).

3. Países que tienen circo pero les falta el pan: Acá, infortunadamente, tengo que nombrar a mi país. Mientras el circo sesiona en dos periodos (del 20 de julio al 16 de diciembre y del 16 de marzo al 20 de junio) desde el Capitolio Nacional y los medios nos proporcionan entrada gratuita, hay un porcentaje inmenso de Colombianos que se sitúan en la extrema pobreza, viven con menos de 1 dólar al día, recurren a “sopas de periódico” para no morir de hambre, o fallecen ante la falta de alimento como sucede en el Chocó.

4. Y países que no tienen ni pan ni circo: Este ejemplo fue el más complicado de encontrar, pero creo poder afirmar que es la descripción más cercana a muchos países del continente africano, donde su clase política se pelea la riqueza del país mientras el resto de la población se muere de hambre y enfermedades terminales, mientras su circo apenas aparecerá con el hasta ahora cuestionado (por los brotes de xenofobia e inseguridad en Sudáfrica) Mundial de la FIFA en 2010.

En este escenario podría decir que no todos los circos son malos, así como no todo el pan es bueno. Y puedo referirme a un país en particular para afirmar lo anterior, aunque confieso que mi ejemplo está basado más en conversaciones con nativos que en mi experiencia propia.

Alemania todavía se siente como un pueblo apenado por su historia. Varias de sus generaciones lamentan las acciones de sus compatriotas en el pasado, y como una de las consecuencias se explica la oleada de inmigrantes que ha recibido el país y las innumerables ayudas que ofrecen a la población extranjera. Por esto mismo su pueblo no es muy patriota y no exhiben su país como la gran potencia que es.

En 2006 llegó un circo, uno de esos circos buenos que traen alegría y diversión, sin maltrato a sus animales ni acciones inhumanas (como las que cometen ciertos circos en Colombia que para alimentar a sus leones utilizan perros de la calle…repudiable!).Tan bueno fue el circo que Franz Beckenbauer, su director, se convirtió una vez más en ídolo de esta nación.

Durante ese año, como no se vivía hacía muchas décadas, la totalidad de los alemanes salieron juntos a las calles, hondearon sus banderas y las colgaron en sus carros y casas, crearon gritos de apoyo a su selección, y revivió el espíritu patriótico de un país que ha vivido en la vergüenza durante muchos años.

El circo los unió, los despertó de su vergüenza, y hoy se respira una Alemania diferente en la que ser patriota y amar a su país no es asociado con actitudes xenófobas o violentas.

Como ven, el circo que estuvo por aquí fue beneficioso, trajo unidad y orgullo a Alemania. Y aunque creo que aún falta que pasen más circos como este por acá, y de manera periódica, la experiencia ha servido mucho.
No se entonces si la propuesta del gobierno, encabezada por el vicepresidente, para llevar el mundial 2014 a Colombia era tan descabellada. Tal vez por el rival (Brasil), por los compromisos adquiridos en la Conmebol, y por la coyuntura en la que nos encontramos no sería el mejor circo para llevar, pero se podría pensar en uno parecido.

Pueda ser que pronto tengamos uno así, un circo diferente al que muchas veces protagoniza el congreso, otra veces el gobierno, y otras veces nosotros mismos. Pueda ser que aprovechemos nuestras oportunidades y pueda ser que las aprovechemos para un desarrollo integral y positivo.

A ver si celebramos y aprovechamos al menos el Mundial Sub-20 de 2011!

Pd. En mi búsqueda de práctica confieso que dediqué parte de mi tiempo a consultar oportunidades en Suiza y Austria por esto de la Eurocopa, pero no me salió! Meses después conseguí mi práctica en Alemania, y resignado a vivir la copa en un país no protagonista de la presente, ví como mi país anfitrión se metió a la final contra todo pronóstico…Al final el campeón fue otro. Buena suerte? Mala suerte? Quien sabe….